lunes, 12 de abril de 2010

Costumbrismo Y Paisajismo Se Impusieron



Un género característico del arte del siglo XIX se conoce como costumbrismo porque el motivo principal, ya sea de una obra pictórica o de una novela, es la descripción de las costumvres de la sociedad.




En México, como en otras partes del mundo, se relaciona ese género con el ambiente del romanticismo del que ya anteriormente habíamos hablado. El espíritu romántico le da mayor intensidad al propósito que anima al costumbrismo, de acercar a los espectadores o lectores a lo más concreto y específico de un tiempo y un lugar.




Los artistas seguidores de las normas de la academia trataron los temas de costumbres; pero otros, sin cánones y sin remanticismos, tambpien los trabajaron.
Además de las costumbres, el otro tema presente en el arte fue el paisaje. Las enseñanzas de Egenio Landesio fructificaron en alumnos como Luis Coto, Salvador Murillo y, sobre todo, en Jóse María Velasco, en cuyas obras abundan los paisajes desde distintas perspectivas, pues de igual manera que móstro horizontes con la mirada científica propia de su tiempo. No cabe duda que Velasco y el paisaje de México siempre van de la mano, y cuando disfrutamos de sus cuadros nos acercamos al siglo XIX.

Éxito Económico Y Costos Sociales Y Políticos.




El balance entre ingresos y egresos de lafederación alcanzó un superávit en los últimosaños del siglo XIX.


La minería fue enfocada hacia la producción de metales, la agricultura se dirigió a los cultivos de el algodón y el henequén; el mercado interno se intensifico la red ferroviaria.


Hubo dos elementos principales pero negativos en el progreso que se consolidaba en el país; la mala distribución de las riquezas y el estancamiento político.



La ley de terrenos Baldíos tuvo como propósito de que las tierras que no estuvieran produciendo, fueran vendidas a inmigrantes o a nacionales para que fueran cultivadas.

Asociaciones E Instituciones Para Orientar La Cultura




Las asociaciones culturales mexicanas del siglo XIX fueron herederas de las que se habían formado desde el siglo XVIII en el mundo occidental, siguiendo las pautas de la Ilustración.




En Nueva España, como en España, existieron academias, sociedades patrióticas, sociedades de lectura y logias, y después de las luchas por la independencia algnas de ellas se mantuvieron.




En el México nacional, algunos grupos de hombres educados también se dieron a la tarea de abrir nuevos espacios para fomentar y difundir las ciencias y las artes.




Conformeavanzaba el siglo, la urgencia de dar rostro a la nueva nación hizo que se promoviera actividades literarias, cientifícas y tecnológicas consideradas útiles para el desarrollo del país.




En 1841, el Ateneo Mexicano congregó a personajes de las difenetes ciencias dispuestos a organizar cátedras de temas como geografía, industria y botánica, y a establecer una biblioteca y una hemeroteca.

Sirvientes Y Peones; Artesanos , Obreros.







Si al final del virreinato los peninsulares formaban la parte más encumbrada y pequeña de la pirámide social, seguidos por criollos, mestizos y mayordomos de fincas, y al final, por los peones y jornaleros, después de la Independencia las élites estaban constituidas por politícos, militares e intelectuales; en el grupo medio se ubicaron los artesanos, comerciantes y propietarios de talleres, y en los estratos inferiores, muy próximos a la miseria, estaban albañiles tocineros, porteros, conductores de carros de basura, empedradores de calles, entre otros.




Esto nos permite imaginar que la diferencia de clases eran muchas, y no necesariamente nos referimos al tipo de población del que se trataba; aunque, en terminós generales, los indigenas eran los que vivían en condiciones mucho más desfavorables.

Diversiones Y Entretenimientos Para Pocos Y Para Muchos

En las ciudades se diversificaron los entretenimientos, pero en el campo siempre había ocasión para las reuniones.


Por otra parte, con los nuevos gobiernos no faltaban las celebraciones de carácter cívico que incluían desfiles, festejos y hasta un Te deum, es decir una ceremonia religiosa de acción de gracias. Po la otra, había una larga lista de celebraciones religiosas que abarcaban los oficios de rigor como la Semana Santa, el Día de Muertos y la Nochebuena, por ejemplo, a los que se agregaban peregrinaciones y ferias relacionadas con la veneración de algún santo.


Las fiestas de la Viergen de Guadalupe y dela Viergen de San Juan de los Lagos, por ejemplo, convocaban a muertos fieles. Además se festejaban bautizos, matrimonios e incluso defunciones.

Despúes de 1830, los restaurantes y los cafés se sumaron a las tertulias junto con y los juegos de cartas, la temporada de ópera, los toros, el circo y las peleas de gallos, que eran excelentes motivos de reunión.

La Población fue Creciendo Y Fue Dispareja Su Distribución




El crecimiento de la población durante las primeras décadas de la vida nacional fue lento pero alcanzó la cifra de siete millones al llegar a la mitad del siglo. Su distribución fue desigual. Se concentraba sobre todo en la zona central, y en algunas regiones formadas en torno a las viejas ciudades coloniales como Puebla, Guadalajara, y Veracruz, regiones donde la agricultura y las manufacturas eran prósperas.





Otros sitios que atrajeron población fueron los de norte, en La laguna, donde se incrementaron cultivos como el de algodón para satisfacer la industria textil.
El desplazamiento de la población por distintos motivos se dio sobre todo hacia las ciudades, algunos iban en busca de seguridad, otros en busca de trabajo
. Las que más creció fue la Ciudad de México.




Pero también se movieron los habitantes del campo hacia las haciendas y los ranchos. Allí se concentró un importante número de población.